Fuente de información: EFE, El País e Intereconomía
El exvicepresidente del Gobierno, Rodrigo Rato dijo estar siendo sometido a una investigación prospectiva, prohibida por la ley e insistió en que los hechos que dieron lugar a su extraña y mediática detención fueron "falsos y erróneos".
En un recurso presentado ante la Audiencia Provincial de Madrid, Rato solicitó el sobreseimiento de la pieza que investiga los supuestos pagos recibidos de Telefónica y de Lazard, compañías para las que trabajó en los años posteriores a su salida del Fondo Monetario Internacional puesto que las acusaciones sólo se basan en hipótesis, y tachó su caso de "inquisición general".
En su escrito argumentó que estaba siendo víctima de violación de derechos fundamentales y de interpretación maliciosa de pruebas.
Rodrigo Rato definió como "caza de brujas" el proceso que se sigue contra él y eso quizá se deba a las múltiples extrañezas que han rodeado su caso empezando por su mediática detención, la confiscación de su despacho de documentación que nada tenía que ver con la investigación, etc...
Respecto a los contratos publicitarios de COR Comunicación, Rato resaltó que no estuvo vinculado a esta sociedad hasta 2014, y defendió que era una firma con más de 15 años de existencia que prestaba sus servicios a cambio de una comisión sobre su facturación a los medios, algo normal.
Cabe resaltar que el informe de la ONIF por el cual el exministro fue detenido en 2015, no fue asumido por la jefa del organismo la cual dijo haberse limitado, "como es habitual", a firmar el informe de los funcionarios.
Además, la Audiencia Provincial tras analizar el caso, apreció que los hechos investigados por la Agencia Tributaria y las pruebas aportadas no probaban la existencia de un delito de alzamiento de bienes por donaciones familiares realizadas en 2013.
Vídeo de Intereconomía en el que se habla del caso de Rodrigo Rato:
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